El fanatismo lingüístico

El fanatismo lingüístico, al igual que todos los fanatismos, conducen al enfrentamiento y a posiciones irreconciliables.

Una vez alguien me estaba tocando los mismísimos con su lengua autóctona y, ya cansado, le espeté que La Rioja también tenía lengua propia pero... que eramos tan generosos que la compartíamos con 400 millones de hablantes, ¡aún se lo tuve que explicar! 

En otra ocasión tuve que sentenciar: 

"en este local, sin menoscabo de la legítima defensa de las lenguas vernáculas, se promociona y defiende el uso del español; por cierto, lengua vernácula de 400 millones de hablantes."

me salió espontaneo..., del alma. Así que antes de que se me olvidara lo escribí y lo colgué de la pared en un marquito en el café